No hubo equivalencias. Nacional lo sometió a Progreso desde el minuto 1. Fue sin dudas la mejor versión del equipo de Lasarte desde que comenzó el año. El comienzo fue de medida y acomodo a la cancha pero rápidamente Boggio y Oliva empezaron a comandar las acciones. A los 11' Jeremía Recoba aprovechó una pelota muerta en el área tras un centro del exDefensor y puso el primero.Tras el único acercamiento de Progreso en todo el primer tiempo, vino el segundo.
En un área Juanse Rivero exigió a Mejía y en la otra cuándo Herazo quedó mano a mano con Nahuel Suárez no falló. 17' y 2-0. Y partido liquidado. El tercero llegó prácticamente veinte minutos después. Luis Maldonado lo bajó a Nicolás López en el área y, tras revisión en el monitor del VAR, el propio delantero se encargó de mandarla a guardar.
El segundo tiempo fue más de lo mismo. Aunque Progreso mejoró un poco y descontó a los 7' del segundo tiempo con un golazo de Nicolás Fernández, once minutos después Copelotti lo bajó a Ancheta en el área y se sancionó el segundo penal de la tarde. Otra vez López adentro y otra vez diferencia de tres goles.
Lasarte empezó a refrescar el equipo y aprovechó para darle minutos a jugadores qué habitualmente no los tienen. Uno de ellos fue Bruno Arady qué a cinco vueltas del reloj del pitazo final tuvo su bautismo goleador en el Campeonato Uruguayo. 5-1 y placar final para un Nacional que plasmó en el resultado la diferencia que hubo en el trámite.